Red de manejo de indocumentados.

jueves, 12 de abril de 2007

(Hernán Ruz González)

En versiones que manejan las autoridades, señalan que debido al intenso operativo en aguas de Quintana Roo contra el narcotráfico, obligó a cambiar la ruta de ilegales cubanos y a buscar nuevos enlaces donde podrían estar involucrados extranjeros.

TIZIMIN, Yucatán, 11 de abril.- El repliegue de una red de manejo de indocumentados cubanos, que son recogidos en aguas mexicanas y trasladados por tierra a la frontera norte del país para su ingreso a los Estados Unidos de Norteamérica, podría contar con una red en la que participan extranjeros que llegaron a la Península de Yucatán como parte del flujo que abandona la isla de Cuba y que operan como enlace para servir como guías a nuevos grupos de balseros.

De acuerdo con la versión que manejan las mismas autoridades, el intenso operativo que se implementó en aguas de Quintana Roo contra el narcotráfico y la denuncia de la actividad de Luis Posada Carriles, obligó a cambiar la ruta de los cubanos que salen de la isla rumbo a la Península de Yucatán y a organizar una red frente a las costas de nuestro Estado.

Hay ya confirmados varios grupos que son detectados después de desembarcar en aguas de la costa yucateca y que se les detuvo tierra adentro, y de otros que ni siquiera se conoce su paradero, como es el caso de alrededor de 25 balseros cubanos que arribaron el pasado viernes por la tarde-noche a las playas de El Cuyo, nadaron poco menos de un kilómetro desde dos yates que los acercaron a la costa y presumiblemente abordaron un vehículo de carga que los sacó de la zona costera, para orientar su fuga al norte del país.

Debido a las condiciones en que se encuentra la vía costera que por un tiempo permitió el enlace entre El Cuyo, Las Coloradas y Río Lagartos, que por efectos del huracán "Wilma" quedó incomunicada, los cubanos tuvieron que reconocer la zona urbana de El Cuyo y salir por la carretera que comunica a ese puerto con Colonia Yucatán y encontrar opciones de viajar a Cancún por la ruta de Ignacio Zaragoza (Kilómetro 80) o bien por Tizimín, para dirigirse rumbo a Mérida o Valladolid, con lo que se presume que fueron detectados en otras poblaciones a su paso.

De lo anterior se desprende que hay una red que se hace cargo de su recepción en la costa del noreste de la Península de Yucatán, posiblemente cerca de la costa de Holbox, en aguas de Quintana Roo, y que los canaliza a las playas yucatecas donde ya son esperados para su conducción por tierra a otros lugares en los que se sugiere la participación de balseros que llegaron a esta parte de México y se quedaron para funcionar como enlace.

Vale mencionar que en un arribo masivo de cubanos que se registró en las playas de Río Lagartos, en una estancia de varias horas de los extranjeros indocumentados en la Casa de la Cultura de ese puerto, se registró la fuga de uno de ellos que se quedó a vivir por un tiempo en esa comunidad costera y que inclusive se le apoyó como integrante de un equipo de béisbol, labor que se le pagaba como "refuerzo" y que le permitió radicar en esta parte del Estado.

Según se pudo confirmar, este balsero fue conocido como "El Veracruzano" y estuvo jugando como refuerzo en el equipo de béisbol de ese puerto, hasta que posteriormente se quitó de esa comunidad costera del Oriente de Yucatán y se fue a vivir a Holbox, por lo que pudiera ser parte de la red que ahora opera en el noreste de la Península para el manejo de nuevos grupos, apoyados con embarcaciones que les permiten movilizarse hasta las playas y ser esperados por vehículos que los transportan por tierra.

El pasado 18 de enero del año anterior, en un rescate que se dio en circunstancias extrañas, fueron asegurados en Río Lagartos 12 balseros (nueve hombres y tres mujeres) que se dijo fueron detectados a 90 millas al norte de Isla Contoy, en Quintana Roo, que al ser trasladados a Río Lagartos declararon que estuvieron más de una semana a la deriva en alta mar, debido a las averías que registró el motor estacionario que les sirvió para salir de Cuba.

El pasado 12 de septiembre, a raíz de un reporte de pescadores, elementos de la Armada de México del destacamento de El Cuyo, aseguraron una embarcación ensamblada en aluminio, que recaló a la dársena de ese puerto y que presumiblemente sirvió de transporte desde la isla de cuba a 8 balseros que fueron detenidos en esta ciudad, en una intensa actividad del Instituto Nacional de Migración que un día antes detuvo también a siete extranjeros procedentes de la isla caribeña en el parque principal de Valladolid.

El sábado pasado fue encontrado sin vida, a unos 400 metros al poniente de El Cuyo, en la playa donde se encontraron también chalecos salvavidas, el cubano Ignacio Calzada Seijo, quien al parecer en el momento de abandonar una de las dos embarcaciones en que arribó un grupo de cuando menos 25 balseros, se golpeó la cabeza con la estructura de la nave y no pudo llegar a la orilla del mar con vida, lo que promovió una fuerte movilización policíaca y militar.