2 de agosto del 2008
Novedades de Quintana Roo
Por Eric Galindo
Un grupo de 30 isleños que salieron de La Habana, Cuba, en una balsa estuvieron a punto de resultar heridos cuando el yate de lujo que los interceptó en altamar se incendió a pocos metros de llegar a la playa frente al hotel Fiesta Americana Coral Beach. La Policía Preventiva logró asegurar a siete ilegales, entre ellos un menor, cuando pretendían abordar una camioneta, los demás se dieron a la fuga.
La travesía que hicieron estos cubanos pudo haber terminado en tragedia cuando alrededor de las 14:30 horas los motores y parte de la fibra de vidrio, de la nave "One Line" que los trasladaba a este destino turístico, repentinamente se incendiaron.
Los cubanos asegurados responden a los nombres de: Maily Balmaceda Delfín, de 20 años de edad; Fidel García, de 24; Emil Jacobo Pérez, de 20; Soreli Morales Borrego, 25; Dany Galindo Vázquez, de 33; Raúl Márquez Hernández, de 35 y el menor Ariel Mauri Morales, de dos años.
De acuerdo con la historia que narraron a Novedades de Quintana Roo, desde el pasado miércoles salieron en una balsa hechiza de La Habana, Cuba, con destino a costas quintanarroenses.
En altamar fueron interceptados por el yate de lujo "One Line". Los 30 cubanos, entre ellos tres menores de edad, abordaron la embarcación para que los trasladara a las playas de Cancún.
Soreli Morales Borrega, quien aún no se reponía del susto que pasaron, dijo que ya estaban a punto de llegar a la playa cuando de pronto vieron que empezó a salir mucho humo de los motores, después se empezó a incendiar.
Se lanzan al agua
Les dio mucho miedo porque pensaban que iban resultar con quemaduras, fue entonces que decidieron saltar al agua, para ponerse a salvo.
De los hechos se percataron prestadores de servicios turísticos del hotel antes señalado, que se localiza a la altura del kilómetro 8.5 del bulevar Kukulcán, quienes a bordo de motos acuáticas lograron rescatarlos.
Los cubanos se dispersaron y se perdieron en la zona hotelera, la policía sólo logró asegurar a los antes nombrados cuando pretendían abordar una camioneta, tipo Van, azul, con matrícula 4769-TMC, que era conducida por Alfredo Humberto Patiño Sánchez.
Éste dijo que iba pasando por el lugar y que le pidieron un aventón. Pero no que pretendía rescatarlos. El chofer fue asegurado por elementos de la PJE, mientras que los cubanos fueron subidos a una patrulla de la Policía Preventiva para trasladarlos a la corporación policiaca y posteriormente ponerlos a disposición de las autoridades correspondientes.
Al parecer el capitán de la embarcación se dio a la fuga con todo y ella. Toda vez que el yate, fue dejando una estela de humo y con dirección a playa Delfines.
Para la PJE este hecho podría ser otro caso de la mafia cubano estadounidense, toda vez que el modo de operar es interceptar a sus paisanos en altamar y después abordan en camionetas para trasladarlos a casas de seguridad, para luego cruzarlos a E.U.
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