Más cubanos están llegando a Estados Unidos

JUAN O. TAMAYO
JTAMAYO@ELNUEVOHERALD.COM

Tres meses después de que Cuba disminuyera sus restricciones a los viajes al extranjero, un número creciente de cubanos están solicitando, y obteniendo, visas de turismo a Estados Unidos o llegando sin visas a la frontera de EEUU con México, afirman funcionarios del gobierno estadounidense.

Los funcionarios advierten que es demasiado pronto para estimar la magnitud del aumento, y que no ha habido señal alguna de un éxodo en masa que acrecentaría significativamente los más de 1.6 millones de cubanos y descendientes de cubanos que ya viven en Estados Unidos.

Pero sus comentarios dan credibilidad a una serie de reportes no oficiales sobre un creciente flujo de emigrantes cubanos moviéndose a través de países tan diversos como Nigeria y Haití —muchos de ellos anhelando llegar finalmente a Estados Unidos.

Un aumento significativo del número de cubanos que entran a Estados Unidos podría generar presiones para reducir los beneficios federales preferenciales que ahora reciben, incluyendo la residencia permanente luego de apenas 366 días en el país bajo la Ley de Ajuste Cubano.

El director de Inteligencia Nacional James Clapper dijo el mes pasado en una audiencia del Senado que la nueva política de migración adoptada por Cuba el 14 de enero había suscitado “un modesto aumento de visas a EEUU”, pero no dio cifras ni otros detalles.

La misión diplomática de EEUU en La Habana ha aprobado de hecho un creciente número de visados de visitante desde el cambio de la política cubana, pero es muy temprano para cuantificar el aumento, dijo una funcionaria del gobierno estadounidense.

También aumentó la cantidad de solicitudes de visas de visitante aunque los rechazos también aumentaron, añadió la funcionaria, que pidió conservar el anonimato debido a las reglas de su oficina.

Familias con hijos, a quienes anteriormente se les prohibía salir, ahora pueden viajar. Pero por lo general sus solicitudes de visa son rechazadas por temor a que se queden en Estados Unidos. La mayoría de las visas de turista se entregan a ancianos que visitan a familiares en EEUU.

Los diplomáticos estadounidenses en La Habana también aumentaron el número de entrevistas para visados de visitante, agregó la funcionaria, tanto para satisfacer la creciente demanda como para reducir el retraso en ese tipo de entrevistas.

La funcionaria señaló asimismo que el período de espera para entrevistas por solicitudes de visados de inmigrante aumentó de cinco a siete meses desde el 14 de enero. Estados Unidos concede 20,000 visas de inmigrante al año a cubanos para disuadirlos de peligrosos escapes por mar.

Vivian Mannerud, propietaria de la agencia de viajes Airline Brokers, radicada en Miami, dijo que ha visto un ligero aumento en la venta de pasajes La Habana-Miami-La Habana desde que se pusieron en vigor las reformas migratorias cubanas. Pero es muy pronto para dar cifras exactas, añadió.

Indicios de un aumento más significativo en el número de cubanos que están llegando a Estados Unidos figuran en cifras oficiales, aunque preliminares, obtenidas por El Nuevo Herald de manos de la Patrulla Fronteriza de EEUU así como de Protección de Aduanas y Fronteras.

Esas cifras muestran que 6,843 cubanos entraron a través de la frontera de México desde el 1ro. de octubre, el comienzo del presente año fiscal del gobierno, hasta finales de marzo. Si continúan llegando al mismo paso, el total cuando termine el año fiscal el 31 de septiembre llegará aproximadamente a 13,700 —un aumento del 33 por ciento con respecto al año fiscal anterior, y el nivel más alto desde el 2005.

Llegadas por mar

Entretanto, las llegadas por mar parecen estar disminuyendo durante el mismo período, tal vez en parte debido al aumento de las oportunidades para salir legalmente de la isla. Esa cifra podría llegar a unos 200 para el 31 de septiembre, en comparación con 423 en el año fiscal anterior.

Los cubanos indocumentados que ponen pie en territorio estadounidense, incluyendo los puestos de inmigración en Texas, se quedan bajo la política de “pies secos y pies mojados”. Aquellos que son interceptados en alta mar son devueltos a la isla.

El abogado de inmigración de Miami Wilfredo Allen dijo que él también ha notado un aumento en el número de cubanos recién llegados, especialmente de España y México, que le piden asesoría. De uno o dos casos a la semana está viendo ahora tres o cuatro por semana, dijo.

Las reformas migratorias de Cuba fueron una de las medidas más populares adoptadas por el gobernante Raúl Castro desde que sucedió a su hermano Fidel. La más importante de ellas es la eliminación del detestado permiso de salida del gobierno conocido como “la tarjeta blanca”.

Además, Castro expandió de 11 a 24 meses el tiempo que los cubanos pueden permanecer en el extranjero sin perder su residencia —y beneficios tales como el acceso gratis a la salud pública. Eso significa que pueden vivir en EEUU por un año y un día, obtener la residencia estadounidense, regresar a la isla para conservar su residencia allí y después de viajar de un país a otro a voluntad.

Según otro cambio, los cubanos que abandonaron el país ilegalmente, tal como los balseros y atletas y médicos que anteriormente eran considerados “traidores” y tenían prohibido regresar a la isla, ahora pueden hacerlo si han pasado al menos ocho años en el extranjero.

Los cambios migratorios de La Habana están diseñados para permitir la salida de “aquellos que estén más molestos con la política oficial” y traer remesas para respaldar las reformas económicas de Castro, escribió el ex analista de la inteligencia cubana Arturo López-Levy en una reciente columna publicada en internet.

“No se proponen desatar una emigración masiva o descontrolada para aliviar una crisis urgente”, agregó López-Levy, quien salió de Cuba hace varios años y es ahora conferencista y está haciendo un doctorado en la Universidad de Denver.

James Clapper dijo al Senado, en una breve referencia a Cuba durante su testimonio sobre asuntos de seguridad global, que ningún país estaba viendo un aumento “significativo” de viajeros cubanos.

Viajes personales

Sin embargo, hay reportes no oficiales de que hay un número creciente de cubanos viajando al extranjero.

En una isla en que los viajes personales al extranjero eran raros antes del 14 de enero, la aerolínea Copa de Panamá ha promovido una venta especial de vuelos de La Habana a Chile, Ecuador, Colombia, la República Dominicana y Panamá, de acuerdo con un despacho de la agencia noticiosa AFP.

Funcionarios del gobierno mexicano están aceptando sobornos de hasta $10,000 para conceder visas de turismo a los cubanos que no cumplen los estrictos requisitos para las mismas, como por ejemplo contar con una entrada de alrededor de $1,000 al mes, dijo una persona recién llegada a Miami. Una vez en México, los cubanos se dirigen a Texas.

Eduardo Matías López, abogado de inmigración de Ciudad México nacido en Cuba, dijo haber notado que desde el 14 de enero los funcionarios mexicanos de inmigración han estado devolviendo a la isla a un número creciente de cubanos que llegan a sus aeropuertos —seis o siete por cada vuelo.

López agregó que él cree que se está devolviendo a los cubanos a causa de errores de los funcionarios, y no por el descubrimiento de visas mexicanas fraudulentas u obtenidas fraudulentamente por los viajantes cubanos.

Se ha reportado además que algunos cubanos están viajando a Haití, que no requiere visado para los visitantes de la isla. Luego ellos se cuelan en la vecina República Dominicana, con la esperanza de encontrar barcos que los lleven de contrabando en dirección este, a Puerto Rico, u oeste, a la Florida.

Un inmigrante cubano en Nigeria escribió un correo electrónico el mes pasado a El Nuevo Herald preguntando cómo podía llegar a México. Agregó que salió de la isla en febrero porque un amigo nigeriano le negocio una visa de turista y un pasaje de avión, escribió el cubano.

“Tengo buen trabajo aquí pero no tengo familia en Miami, que yo sepa”, escribió. “Pero para todos los cubanos, esa es la tierra prometida”.

Alfonso Chardy de El Nuevo Herald contribuyó a este reportaje

Tomado de: El Nuevo Herald