Posted on Thu, Dec. 21, 2006
CASEY WOODS
The Miami Herald
EL GOBERNADOR Jeb Bush, izq., junto a los congresistas republicanos Lincoln (centro) y Mario Díaz-Balart. El homenaje a Bush, celebrado ayer en el Hotel Biltmore, atrajo a 800 personas. C.M. GUERRERO / El Nuevo Herald
Un nutrido grupo de figuras influyentes de la comunidad cubanoamericana honraron ayer al gobernador saliente Jeb Bush, en un cariñoso hasta luego a un líder que la comunidad del exilio ve como el más firme campeón de su causa --una Cuba libre-- en la historia del estado.
''Como cubanoamericano, quiero darle las gracias por ser lo que yo llamaría, el primer gobernador cubanoamericano'', dijo el senador Mel Martínez. ``No sólo con su lenguaje, sino también con su comprensión e intrínseco amor por el pueblo cubano.. . él ha sido una ayuda inmensa a la causa de la libertad''.
Bush respondió con igual afecto. ''Si Bill Clinton puede ser el primer presidente afronorteamericano, yo puedo ser el primer gobernador cubanoamericano'', manifestó durante su discurso a cientos de partidarios.
La actividad, el almuerzo anual del Comité de Acción Política EEUU-Cuba, atrajo a un quién es quién de la comunidad del exilio y sus partidarios, incluyendo a los representantes federales republicanos Lincoln y Mario Díaz-Balart y la representante demócrata Debbie Wasserman-Schultz. El grupo político ha cabildeado fuertemente en el Congreso para aplastar los esfuerzos por debilitar elementos del embargo contra Cuba.
En su discurso a más de 800 personas reunidas en el Hotel Biltmore de Coral Gables, Bush se refirió a los controversiales comentarios del representante republicano por Colorado, Tom Tancredo, quien el mes pasado llamó a Miami un ``país del Tercer Mundo''.
''Miami es el lugar más bello del mundo'', dijo en español. ``El congresista de Colorado no sabe nada de Miami''.
Bush no opinó directamente sobre otra polémica que perturba a la comunidad cubanoamericana, sobre una posible investigación del Congreso en torno a Radio y TV Martí, que funcionan con fondos del gobierno, aunque no expresó apoyo a los esfuerzos de ambas estaciones.
''La gente que quiere que llegue más verdad [a Cuba] porque cree que eso acelerará la transición a la libertad en Cuba cree que tenemos que encontrar maneras de hacer que Radio y TV Martí penetren Cuba, y estoy de ese lado'', indicó en una entrevista posterior.
Con un presupuesto de $37 millones, Radio y TV Martí, creadas para promover la democracia en Cuba, se han visto acosadas por el amiguismo político y los presuntos malos manejos, de acuerdo con auditorías realizadas en el 2003 y 1999. El gobierno está realizando otra auditoría. TV Martí también ha luchado por ampliar su audiencia.
El martes, oficiales de Radio y TV Martí anunciaron que se invertirán $377,500 para emitir ciertos programas en estaciones surfloridanas, gracias a un vacío en la ley que prohíbe la diseminación de propaganda en EEUU.