Publicado el jueves, 05.01.1
Es realmente inexcusable que los exiliados y nuestros descendientes más influyentes hayan esperado décadas para erigir un museo del exilio cubano. Pero más vale tarde que nunca. La buena noticia es que, a falta de uno, es probable que pronto contemos con dos. En Coral Way abrirá sus puertas esta primavera el Museo Cubano con el objetivo de preservar y promover el arte que han realizado y realizan centenares de artistas cubanos, especialmente desde el destierro. Y ahora se baraja seriamente la idea de erigir el Museo de Historia del Exilio Cubano, cuyo propósito sería contar precisamente las peripecias desgarradoras que han vivido y que aún viven millones de compatriotas sin que hayan surgido indicios definitivos de que vayan a desaparecer las causas de su exilio. Son a ojos vistas dos esfuerzos tardíos pero encomiables que algún día aprovecharán y agradecerán futuras generaciones de cubanos y miamenses. Y sin embargo…