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Agencias
La llegada de cientos de indocumentados cubanos a las costas del Caribe mexicano en los últimos meses ha alertado a las autoridades, que investigan si existe una red de tráfico de personas y buscan esclarecer varios asesinatos supuestamente relacionados con el asunto, informó EFE.
Aunque la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR, Fiscalía) en Quintana Roo, donde está el balneario turístico de Cancún, aún no reconoce oficialmente la existencia de tales redes, en los últimos meses ha detenido a 18 personas y tiene abiertas 10 investigaciones en relación con esta actividad.
Según la fiscalía, buena parte de los arrestos han sido de cubanoamericanos interceptados frente a las costas de México, quienes intentaban introducir al país a emigrantes de la isla caribeña sin papeles.
Datos del Instituto Nacional de Migración (INM) revelan que entre 2003 y 2006 los indocumentados cubanos capturados en la zona pasaron de 34 a 572.
Hasta fines de septiembre pasado eran casi 500 los cubanos que habían sido detenidos este año.
En todo México se ha pasado de 254 arrestos de cubanos indocumentados en 2002 a 2.205 en 2006.
Las dos mayores operaciones recientes datan del 3 de agosto, cuando 37 cubanos buscaban las costas de Quintana Roo, y el 13 de junio, cuando 57 fueron interceptados antes de llegar a la costa.
En ambos casos fueron arrestados los transportistas clandestinos que los llevaban a México.
Hasta agosto de este año, la oficina del INM en Quintana Roo había iniciado 16 querellas contra 40 personas por el delito de tráfico de emigrantes cuando el año pasado sólo se produjeron 10 denuncias.
De enero a agosto de 2007, la cifra de querellas por tráfico de indocumentados que interpuso en INM creció un 78% respecto al mismo período del año anterior, y los involucrados en ese delito en un 300%.
Además, durante 2007 han sido asesinados en Cancún el cubanoestadounidense Luis Lázaro Lara Morejón, de 45 años, su pareja, María Elena Carrillo Sáenz, y dos personas más, Jesús Aguilar Aguilar y Edwin Park Gómez.
El diario oficialista Granma publicó el pasado 20 de septiembre un reportaje según el cual los traficantes de personas tienen como base en México el circuito turístico de Isla Mujeres, Cancún, Playa del Carmen y Mérida.
De acuerdo con la publicación, esas mafias mueven a unas cien personas por semana y llegan a facturar "hasta un millón de dólares al mes".
Pescadores de Isla Mujeres, situada frente a las costas de Cancún donde han ocurrido buena parte de las detenciones en el mar, están convencidos de que los indocumentados cubanos reciben ayuda de organizaciones desde México.
"Como pescador yo veo muy difícil que lleguen solos. Creo que los ayudan", declaró a EFE Andrés, un buen conocedor de esas aguas.
Andrés señaló que en las inmediaciones de Isla Mujeres hay simas marinas muy profundas, fuertes corrientes y vientos que hacen necesario saber bien cómo manejarse en la zona, especialmente para las embarcaciones más endebles.
Los pescadores y residentes locales consultados afirman que ellos no participan en el trasiego de indocumentados y culpan de esa actividad a personas llegadas de fuera.
"Uno escucha que llegan por el lado del Mar Caribe, pero nada más. Los pescadores los pueden ver en alta mar pero una vez llegan a tierra se pierden. Es raro", agregó una persona que trabaja de guardia de las áreas naturales de la zona.
El fiscal de Quintana Roo, Bello Melchor Rodríguez, dijo no tener nada que declarar acerca de la posible existencia de redes.
"Únicamente estamos investigando los asesinatos de cubanos que sucedieron en Cancún", afirmó, según EFE.
La fiscalía local analiza los recientes asesinatos supuestamente ligados al tráfico de personas y fue la primera en hablar de una red de traficantes entre Cancún a Mérida con apoyo de grupos afincados en Miami, pero luego se desdijo de aquella postura.
Cada indocumentado cubano paga entre 10.000 y 12.000 dólares por un trayecto desde la Isla hasta México y desde allí por tierra hasta Estados Unidos, según las investigaciones de esa dependencia.
Los cubanos que logran pisar suelo de Estados Unidos, país con el que México tiene una frontera de 3.200 kilómetros, pueden solicitar asilo político en virtud de la Ley de Ajuste Cubano, de 1966.