Posted on Tue, Dec. 05, 2006
RUI FERREIRA
El Nuevo Herald
Una veintena de organizaciones exiliadas, agrupadas en la coalición Consenso Cubano pidieron ayer rebajar las restricciones de viaje a Cuba para los cubanoamericanos y el envío de ayuda humanitaria a la isla.
Estas demandas surgen al calor de un pedido similar por parte de la oposición interna en la isla y coinciden con una oferta de dialogo a Washington por parte del gobernante interino cubano, el general Raúl Castro.
El paquete no ha sido orientado hacia Washington, sino que también plantea demandas al gobierno de la isla, entre ellas el fin del llamado ''permiso de salida'' o visas de entrada, y que los cubanos puedan entrar y salir libremente de su país, y establecerse donde quieran.
Todo esto debería ser acompañado, según estima la coalición, por el fin de toda medida restrictiva que Washington ha implementado --principalmente desde el 2004-- que dificulta el envío de recursos al los familiares y los viajes a la isla por parte de los exiliados cubanoamericanos.
''Las medidas impuestas que le limitan o le niegan a los cubanos sus derechos fundamentales a las libertades de poder viajar libremente para salir y regresar a Cuba con fines humanitarios o de reunificación familiar, de tener acceso a comunicación fluida, y de poder enviar y recibir libremente ayuda familiar y personal, violan derechos fundamentales de los cubanos, dañan a la familia cubana, y constituyen contradicciones éticas de gran trascendencia'', dijo Consenso Cubano en el documento divulgado ayer en conferencia de prensa en Miami.
Además del Grupo de Estudios Cubanos y la Fundación Nacional Cubano Americana, la coalición está formada, entre otras, por la Coordinadora Social Demócrata, el Partido Demócrata Cristiano de Cuba, el Partido Social Demócrata de Cuba y la Unión Liberal Cubana; así como Acción Democrática Cubana, Agenda Cuba, Arco Progresista, Comité Cubano Pro Derechos Humanos, Hermanos al Rescate y el Movimiento Democracia.
En la conferencia de prensa, los participantes no escondieron que su postura puede interpretarse como un cambio en las posiciones tradicionales del exilio cubano.
''Vine de una postura de línea dura, pero lo cierto es que aislar a la gente no nos ha producido un cambio en los últimos 47 años. El aislamiento de la gente sólo ayudó a apoyar a la dictadura'', dijo el empresario Carlos Saladrigas, vicepresidente del Grupo de Estudios Cubano.
Saladrigas recordó que la ayuda exterior tuvo un papel preponderante en la desintegración del comunismo en Europa Oriental.
''¿Qué nos hace pensar que este tipo de política [las medidas actuales implementadas contra el régimen] va a funcionar en este caso, cuando no fueron siquiera esgrimidas en el otro [el caso europeo]?'', dijo el empresario.
Aun así, pese al cambio de color en el Congreso en Washington, lograr una transformación de la política hacia la isla pudiera no ser una tarea fácil para Consenso Cubano.
''El verdadero consenso sobre la crisis cubana que hace falta enfatizar en estos momentos tiene que enfocarse en la libertad inmediata de todos los presos políticos sin excepciones y en la convocatoria de elecciones pluripartidistas para Cuba, y no en concesiones unilaterales a la tiranía'', comentó el congresista republicano Lincoln Díaz-Balart, vicepresidente del Comité de Reglamento da la Cámara de Representantes.
El sábado en La Habana, Raúl Castro propuso establecer un diálogo con Estados Unidos, en el marco del respeto mutuo, pero Washington rechazó de plano la oferta con el argumento de que el régimen necesita, primero que todo, dialogar con sus propios ciudadanos.
''Nuestra posición clara de apoyo a una transición democrática ya ha sido expresada'', dijo ayer el portavoz del Departamento de Estado, Sean McCormack, quien enfatizó que Estados Unidos no tienen hacia el gobierno cubano actual la predisposición de trabajar juntos, como ha manifestado tenerla hacia el gobierno del presidente venezolano Hugo Chávez.
''El diálogo que debería estar teniendo lugar es no entre Raúl Castro y cualquier grupo foráneo o cualquier país'', dijo McCormack. ''Es entre el gobierno con el pueblo cubano y se debería estar hablando de una transición a una forma democrática de gobierno en el país'', añadió el portavoz.
rferreira@herald.com