Su historial es el de un grande de la música cubana e internacional, pero a pesar de eso, la modestia es un aspecto muy importante de las cualidades que hacen del contrabajista y creador del mambo Israel López ''Cachao'' un ser tan querido y admirado por todos.
``A veces uno le da un consejo a un niño, y no piensa que el niño lo va a asimilar, pero yo sí lo asimi-
lé'', confiesa. ``Mi padre me dijo a los cuatro años: `Mira, mi hijo, hay una cosa que tengo que decirte, a lo mejor no me vas a entender ahora, pero mira, usted puede ser herrero, carpintero, médico, presidente de la República, pero antes que nada aprenda a ser persona''.
Eso nunca lo olvidó. ''Seguí la conducta de él, que era una persona seria. Llevé 58 años de matrimonio con mi señora, que la perdí hace dos años'', dice con cierta tristeza. 'Porque los músicos tienen una cosa: son mujeriegos, dicen tengo `tantas novias', pero yo no. Siempre fui buscando la manera de seguir mucho a mi padre, con una devoción tremenda, y la modestia me sirvió de mucho''.
Esa es la cualidad que le permitió seguir luchando en el exilio, porque Cachao fue famoso en Cuba con la orquesta de Arcaño y sus Maravillas, cuando el danzón era el rey en los salones de baile --y él compuso 1,500 en récord, junto a su hermano Orestes, que compuso otros 1,500--, y con la Filarmónica de La Habana, en la que empezó a tocar a la edad de nueve años, y con la que acompañó en la ópera a Ezio Pinza y a Renata Tebaldi entre muchos grandes.
Pero el exilio desde principios de los años 60 fue duro con él por mucho tiempo. En España, Dámaso Pérez Prado lo descubrió en Madrid en 1962 y le pidió que tocara con su orquesta de mambos en Radio Madrid, el ritmo que había creado el Maestro Cachao y que se le atribuía solamente a Pérez Prado. ''Hicimos el mambo en el año 37, era una época romántica, y esto se movía a una vertiginosidad maravillosa. La gente no lo bailaba, por eso se hizo el mambo danzón'', recuerda el músico. 'El mambo se hizo para teatro, era como una descarga del propio músico. Mambo es una palabra de los congos, quiere decir un cuento, un canto de cuna, `te vamos a cantar un mambo: Drume mi niña', decían. El 'mambo danzón' estaba dividido en tres partes: paseo, para conversar, parada, que a lo mejor era para enamorar. Segunda parte, del violín, el romance, como si fuera el bolero. La tercera parte, la síncopa, que es lo que tiene el mambo, más festivo. Después que se creó, las mamboletas lo llevaron al teatro. El mambo que se llevó a México fue el de Pérez Prado que lo internacionalizó. Lo paseó por el mundo entero, hay que agradecérselo a él. No somos rivales, como dice la gente por ahí''.
Luego en Miami, Cachao estuvo mucho tiempo tocando en grupos pequeños, sin ser reconocido. ''Miami es Miami, a esto lo llaman el cementerio de los artistas, no es Nueva York, yo viví 10 años en Nueva York'', comenta Cachao. Hasta que lo ''redescubrió'' Andy García, quien lo llevó al estrellato de nuevo con un documental, Como su ritmo no hay dos, en 1992, que ayudó a elevarlo de la oscuridad a la tan merecida luz pública como leyenda viviente.
''En ese momento yo estaba en San Francisco, en un concierto, con Santana, Pedraza y otros'', explica Cachao. ``Andy estaba en dos semanas de descanso de la filmación de El padrino, me dijo que quería hacer un trabajo sobre Cachao: mambo y descarga en Miami. A partir de ahí, y de la ayuda de Emilio Estefan y Glorita fue la que subió mi popularidad''.
Este sábado 22 las estrellas de Miami y de otras ciudades se enorgullecerán en acompañar a Cachao en un concierto magno celebrando sus 80 años con la música: Willy Chirino, Lissette, Issac Delgado y Lucrecia. Entre los músicos se encontrarán Cándido Camero, Orestes Vilabó, Jimmy Bosch, Federico Britos, Alfredo de la Fé, Dave Valentín y Edwin Bonilla.
La primera parte será totalmente de danzones cubanos, todos originales de Cachao. ''Estoy componiendo música desde el año 1935 [nació en 1918], incluyendo el danzón Buena Vista Social Club, que es del año 39''. La segunda parte será la descarga, ''todos son muy buenos, son gente que representa'', acota el gran contrabajista, quien originalmente fue bongosero, un gran descubrimiento. 'Comencé en 1926 con un conjuntico que se llamaba `En honor a Carlos Miguel de Céspedes', que era ministro de Obras Públicas, el que hizo el Capitolio y la Carretera Central. Yo tenía ocho años, Roberto Fa era el cantante de la orquesta y yo era bongosero''. Ahora falta saber si también nos tocará en el concierto el bongó, lo inaudito.•
olconnor@bellsouth.net
'Cachao', sábado 22 de septiembre, Carnival Center of the Performing Arts. 1300 Biscayne Blvd, Boletos: (305) 949-6722.
22:30:00
