Arrestan en alta mar nueve cubanos y dos dominicanos.

El Nacional.com
Por DIOGENES TEJADA

AEROPUERTO DE LAS AMERICAS.- El Servicio de Guardacostas de Estados Unidos arrestó en alta mar a nueve cubanos y a dos dominicanos que intentaban llegar clandestinamente a Puerto Rico a bordo de una embarcación de 22 pies de eslora.

Cinco de los cubanos fueron transportados a la comandancia de la Marina de Guerra en La Romana, mientras que los cuatro restantes y los dos dominicanos, las autoridades puertorriqueñas decidieron quedarse con ellos para fines de investigación.

Fuero traídos y entregados a miembros de inteligencia M-2 los cubanos Lisandra Pérez López, Clara Matos, Juan Antonio Benítez, Alberto Rafael Matos y Jayosmi Belmonte, quienes fueron entregados a Migración por disposición del jefe de la Marina vicealmirante Julio César Ventura Bayonet.

Los otros cubanos restantes Camila Castellanos, Jorge Castellanos, Lina Fauvel y Rafael González Ferro, las autoridades puertorriqueñas decidieron quedarse con ellos, así como con los dominicanos Diani Roberto Javier Báez y Wilki Rosario López.

El vocero de la jefatura de la Marina de Guerra, capitán de fragata Carlos Rodríguez Medrano, informó que los nueve cubanos y los dos dominicanos fueron detenidos en las proximidades de la Isla Mona, a bordo de la embarcación identificada como La Sirena, de 22 pies de eslora.

Indicó el oficial que los cubanos rehusaron revelar la cantidad de dinero que pagaron a los dos dominicanos que capitaneaban la embarcación en la que viajaban clandestinamente a Puerto Rico.

Rodríguez Medrano dijo que con estos nueve cubanos, suman más de 30 los detenidos por la Marina de Guerra y el Servicio de Guardacostas de los Estados Unidos en menos de dos meses.

Comunicó que Ventura Bayonet instruyó al comandante de inteligencia M-2, capitán de navío José Roberto Muñoz Monción, para el incremento del patrullaje en la zona Este del país y otros puntos para contrarrestar la salida de yolas hacia Puerto Rico.

También desde ayer fueron incorporadas a los servicios de vigilancia en alta mar, las dos lanchas rápidas donadas a la Marina de Guerra por el gobierno de los Estados Unidos con el propósito de combatir el narcotráfico, contrabando, tráfico de ilegales y otras acciones ilícitas.